lunes, 14 de febrero de 2011

Todo en uno



Tal vez ahora tenga solo la
mitad, pero tu amor no fue fugaz.
Y cuando te hice una pregunta que me intrigaba, tu respuesta no pudo ser mejor que el beso perfecto y desde hace tiempo anciaba tus labios, el dulce olor de tu piel; como no sentirlo si fuiste mi amor de colegio!
Me dijiste alégrame la vida y te lleve a un mundo lleno te rosas rojas! te gustaba lo variopinto de mi ser. Igual sabias que era muy natural, lleno de felicidad y mi sencillez era mi virtud... No importa donde estabas, siempre y cuando me esperaras llegaba a ti así sea a la luna caminando.
Mi cama era el lugar perfecto para expresar nuestro sentir con amor y con pasión.
Te confieso que el misterio me encanta; pero como no ser si vivíamos un romance de película y la protagonista de mi corazón eras tú!
Tal vez pienses que ahora estoy tirado en el suelo y mendigando mi vida; pero no es así. Y como la vida continua ya completaré esa parte de mi ser...
Igual te regalo un beso con sabor a caramelo...

domingo, 21 de marzo de 2010

Mitad


Es todo lo que tengo...

lunes, 7 de diciembre de 2009

Fugaz



Tu aparición en mi vida llegó de golpe. De forma inhóspita entraste en mis pensamientos y no entendía el por qué de tanta algarabía. Igual estar a tu lado era lo que me interesaba.

Cada vez que decías algo, te miraba con atención, tratando de entender como alguien puede crear alegría a un ser…

¡Eras única!

Así mismo, eras. Porque ya formas partes del pasado. Aunque tampoco se si serias mi presente y futuro.

Pero de lo que si estoy seguro, es que nadie como tu volverá a pasar en mil años luz…

domingo, 23 de agosto de 2009

Pregunta

...

¿Y si solamente pido un poco de ti?


...

miércoles, 13 de mayo de 2009

El beso perfecto


(foto: flickr DobleW)

El atardecer en la playa es uno de los mejores paisajes que puede ofrecer este planeta. Y si es en compañía mejor…

Aunque era muy joven cuando ocurrió ese acontecimiento, lo recuerdo como si fuera ayer. Para ese entonces ella era la única que acaparaba mi atención. La playa quedaba cerca del pueblo donde vivíamos y había un lugar secreto; bueno para mi era mi lugar secreto. Ese día sabía que nos daríamos nuestro primer beso y el mar seria testigo de ese momento memorable.

Prendí una fogata y lleve una frazada. Ella quería estar abrigada y calientita a mi lado. Puntual llego ella. El corazón me latía a mil, en su caminar se notaba sus nervios. Apenas éramos unos niños pero con pensamientos de “adultos”. Con un abrazo fuerte la recibí, sus ojos iluminados indicaban que el sentimiento era mutuo.

Una charla prolongada nos mantuvo juntos con la frazada frente a la fogata. Era hora de la despedida. Y el momento mágico había llegado.

La tomé de las manos, la miré fijamente con una sonrisa de punta a punta. Ambos cerramos los ojos y acercamos nuestros labios rojizos para unirlos en un eterno beso.

Mi piel se erizaba con cada movimiento que hacia nuestras lenguas, mis manos agarraron su cuello suavemente; las de ellas se entrelazaban en mi cintura. Sentí como si en la playa cesaban las olas y la fogata se encendía con el calor que generaban nuestros cuerpos. Luego de volver a la realidad nos tomamos de las manos, nos dimos media vuelta y nos marchamos. Atrás quedaban las cenizas de la fogata y el momento perfecto de nuestras vidas…